B. Braun anuncia la automatización exitosa de su centro logístico de Barcelona al incorporar 18 robots AMR al proceso de preparación de pedidos
La Dirección Logística de B. Braun en España ha implantado un proyecto de automatización en su centro de distribución ubicado en Santa Oliva (Tarragona), con el objetivo de optimizar el transporte interno de mercancías y eliminar los riesgos relacionados con la conducción de carretillas. Como ya anunciamos en primicia en 2022, el proceso de preparación de pedidos de la planta de Braun se estaba adaptando a la innovadora tecnología que ofrecen las soluciones “Good to person” para la preparación de pedidos.
El centro de distribución de B. Braun es un coloso inaugurado en 2014 con capacidad de almacenamiento para 42.000 palés, cuenta con almacén autoportante de 25 metros de altura y un almacén automático compuesto por 11 transelevadores.
La empresa integradora que asumió el reto de afrontar la automatización de la preparación de pedidos ha sido NAKIRE, un experto en soluciones basadas en robótica móvil, quien ha instalado 18 robots AMR (Robots Móviles Autónomos) del fabricante HikRobot colaborando estrechamente con el equipo de IT de B. Braun España. “El know-how de todos los participantes ha sido clave”, afirma Sergi Cercós, jefe de almacén y uno de los responsables que ha participado en el proyecto.
El proyecto se inició en 2021 con la premisa de mejorar los procesos mediante la integración de robots móviles autónomos y las tecnologías asociadas. “El principal desafío ha sido la integración de todos los sistemas implicados en el desarrollo porque funcionan con tecnologías muy distintas. El objetivo era que el usuario final lo pudiera gestionar todo como un único elemento a través de una interfaz única y simple”, señala Albert Urgell, técnico IT-Logística.
El complejo sistema consta como eje principal de una flota de 18 robots AMR que se desplazan de forma autónoma gracias a un sistema de lectura óptica de unos códigos bidimensionales ubicados en el suelo y en las estanterías (racks) a lo largo y ancho del área de preparación de pedidos. Las cámaras integradas en cada robot leen los códigos y localizan los palés donde se sitúan las cajas de producto acabado.
El robot para hacer pedidos en el almacén se sitúa en primer lugar debajo del palet, lo eleva y lo desplaza hasta el puesto de trabajo donde una persona recoge la cantidad necesaria para preparar los pedidos en curso. Una vez se retiran los bultos necesarios, el equipo devuelve el palé a su ubicación inicial y repite el procedimiento cuantas veces sea necesario hasta completar la totalidad de los pedidos programados.
Sergio Aranda, jefe de almacenes, ingeniería e instalaciones de la planta señala que “Los robots están programados para realizar siempre el recorrido más eficiente gracias a un software de gestión de tráfico, por lo que hay un importante ahorro de tiempo respecto a los desplazamientos tradicionales. Gracias a ello, las personas pasan a realizar únicamente tareas de mayor valor añadido a la vez que eliminan su exposición a los posibles riesgos que implica trabajar con carretillas en el proceso de preparación de pedidos.”
Fuente: Bbraun.es