SICK lanza la nueva serie de encoders incrementales DLS40, un modelo que cuenta con uno de los diseños más reducidos del mercado para lograr la máxima compatibilidad del producto.
El encoder incremental de 40 mm de eje sólido del SICK DLS40 destaca principalmente por su tamaño. Con tan solo 20 mm de grosor, es un tercio más delgado que sus rivales más directos y casi la mitad en comparación con la mayoría de encoders de uso común en este rango de rendimiento. Con un espíritu innovador con el que ofrecer soluciones para la Industria 4.0, SICK ofrece nuevamente un producto innovador, con una carcasa y brida fabricadas en una única pieza para lograr simplificar el montaje, ahorrar costes y poder incorporarse incluso en los encajes más reducidos.
Disponible a un precio muy competitivo, el diminuto SICK DLS40 consigue un alto rendimiento a nivel de velocidad y posición para cualquier aplicación, especialmente aquellas en las que el espacio escasea. Su diseño permite a los fabricantes integrarlo de forma compacta en todo tipo de maquinaria, como vehículos guiados automáticamente, a la vez que ahorra costes en tareas de desplazamiento. El SICK DLS40 es una solución sencilla y económica para tareas de control de velocidad en maquinaria de transporte, corte, impresión y construcción.
La familia de encoders incrementales SICK DLS40 cuenta con variantes con un rango de resolución de entre 50 y 1024 pulsos por revolución (PPR). Además, incluye todos los interfaces de comunicaciones estándar: TTL/RS-422, HTL/push-pull y Open Collector. Esto garantiza una amplia compatibilidad eléctrica con cualquier sistema.
Para un encoder con esta capacidad de rendimiento, el DLS40 ofrece una resistencia excepcionalmente robusta a golpes, vibraciones y cargas del eje, una característica imprescindible para la mayoría de procesos de automatización, control de velocidad y medición.
Otra de las innovaciones que presenta el SICK DLS40 es un código QR de fácil visibilidad grabado con láser, que permite a los usuarios tener un acceso directo mediante el uso de un smartphone a instrucciones actualizadas en la nube sobre cómo operar con el dispositivo.
Con esta novedad, se evitan los retrasos o tiempos de inactividad causados cuando un dispositivo no puede ser identificado por una etiqueta adhesiva impresa descolorida o en mal estado.
Concienciado de las necesidades actuales de las empresas de automatización, SICK ha conseguido fabricar este producto reduciendo el impacto medioambiental. El tamaño del dispositivo implica usar menos material de embalaje y una mayor capacidad de transportar más productos en espacios reducidos, por lo que la huella de carbono disminuye. Asimismo, el código QR grabado con láser también elimina la necesidad de imprimir y enviar manuales de operación en papel.
Fuente: Sick.com
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