IGUS ha desarrollado un nuevo modelo de robot colaborativo de plástico que le convierte en uno de los modelos más ligeros y económicos del mercado
Los robots colaborativos ayudan a automatizar tareas repetitivas como pueden ser las aplicaciones de manipulación de materiales o de paletizado. Es por ello que IGUS ha desarrollado una nueva generación de robots colaborativos llamados Rebel, los cuales se distinguen de sus competidores porque están fabricados en un plástico ligero con un peso que no supera los 10 kg, que viene a ser la mitad de lo que suele pesar cualquier modelo de sus competidores.
Para convertirse en uno de los cobots más ligeros del mercado, Rebel cuenta con un engranaje optimizado que está totalmente integrado con el motor, encoder, control de fuerza y controlador. Los componentes electrónicos del engranaje de transmisión armónica del modelo Rebel hacen que sea posible la colaboración entre humanos y robots (HRC), gracias a la tecnología del encoder que le permite determinar y limitar las fuerzas así como el par a través de la corriente del motor. Para lograrlo IGUS ha integrado un encoder doble en el que se realiza una medición por delante y por detrás de la articulación que detecta las fuerzas y los niveles de par.
Rebel es un cobot de 6 ejes, ofrece un alcance total de 600 mm y un alcance nominal de 350 mm, y cuenta con una capacidad de carga de hasta 2 kg de peso. El cobot no necesita un armario eléctrico y es totalmente compatible con Igus Robot Control, el sistema de control desarrollado por el fabricante.
Otra de las grandes ventajas que ofrece el modelo Rebel de IGUS es su precio de compra, ya que el coste del robot no supera los 4.000 €, favoreciendo su integración en aplicaciones que no requieran de las prestaciones más exigentes. Alexander Mühlens, responsable de la tecnología de automatización de Igus, señala que “Muchas empresas jóvenes están demostrando actualmente lo que es posible hacer con la automatización de bajo coste”.
Qué duda cabe que la reducción de los costes repercute en sus prestaciones, como es el caso de la repetibilidad, en donde ofrece +/- 1 mm, pero es igual de cierto que no todos los procesos de automatización requieren de aplicaciones con gran precisión.
Algunas de las tareas en las que se puede integrar el robot Rebel son:
- Aplicaciones industriales y de servicio
- Procesos que precisan ser colaborativos
- Aplicaciones sobre robots móviles
- Servicios de recogida y entrega
- Procesos pick and place
- Líneas de montaje
Fuente: Igus.es
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